Te he visto convertido en ave...¡No! ya lo eras, lo sabía...
Te cuide cuando llegaste, pues las heridas te hacían volar bajo, reposaste en mi seno
y mi calor hizo que tu sangre recorriera con fuerza tu espléndido cuerpo de libertad..
Tus ojos profundos como este manto líquido, se abrieron con la lentitud del amanecer,
¡¡Bendito instante!! hubiese querido con mis propias manos tomar la cortina nocturna y cubrir entero el firmamento con ella, si tal vez hubiera presentido el final...
!Adiós!, recobraste tus sentidos y tus cristales están puestos fijos ahora en el horizonte, abre tus alas, vuela, el alba esta hermosa, vuela ofrenda fugaz de mi salvador....Y aunque ya no estarás, recordaré con júbilo que en tu piel llevas la mía, en tus labios mi roce...Y en tu corazón...Mi sangre...
2 comentarios:
Mary: las palabras dicen lo que nuestros sentimientos impiden... gracias por existir y hacer de tus palabras, rastros de la consciencia divina, momentos intimos con los recuerdos que invaden nuestros cuerpos que son los que se estremecen con aquello que denominamos: amor.
No sabia que eras sensible a estas cosas, es muy bella y ahora que lo ves con la perspectiva del tiempo, es cuando uno se puede reir de ese pasado....
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